Clío en el espejo

¡Hola, bienvenido!. Cada uno de nosotros construye y, a la vez, es construido por su historia en el espejo. Y la historia siempre llega a ser diáfana. Cada historia cuenta. Muchas gracias por la visita. ¡Éxitos y bendiciones!

Mi amado


Mi amado

Nos conocimos un domingo, una noche fría de invierno, pero con nuestras emociones llenamos el ambiente de calor. Temprano ese día había asistido a la misa, como era costumbre. El padre habló del tema de las relaciones y la familia. Aunque me aburrí un poco en el servicio pues pensé no era un tema para mi edad, después durante el día medité al respecto.
En realidad, aunque era joven aún pues tenía sólo dieciséis años, meditar sobre el futuro y con quien forjarlo y compartirlo no parecía mala idea. Y esa misma noche conocí a mi amado. A partir de entonces todas las noches tenemos nuestro romántico encuentro. Conversamos para conocer nuestros sentires, sueños y proyectos. Nos llenamos de caricias, besos, abrazos y carnal pasión.
De aquel  domingo hace ya cuarenta y cinco años. Ambos hemos envejecido, pero igual nos encontramos cada noche sin falta en nuestra morada de amor. Algunas veces él se llena de mayor locura y me propone casarnos, y debimos haberlo hecho, porque ¿qué más da?, somos una feliz pareja nocturna y mejor alma gemela no podríamos encontrar. ¡Oh, como quisiera poder pasar todo el día soñando y así estar siempre con mi amado!
NOTA:

Este microrrelato participa en el Concurso de Microrrelatos "MICROLOVE II" propuesto en la comunidad  ALMAS DE BIBLIOTECAS Y CINES en Google+ por los administradores del blog El Círculo de Escritores

Créditos:
photo credit: Candida.Performa via photopin cc

No hay comentarios:

Publicar un comentario