"Siempre use la palabra imposible con la mayor cautela." Wernher von Braun (1912-1977). Ingeniero aeroespacial alemán, nacionalizado estadounidense.
Mi Saturno V
Mamá solía decirme: “Te la pasas en la luna, Jaime”, y
aunque ella lo hacía en referencia a que yo siempre andaba despistado e imbuido
en mis pensamientos, la verdad es que
incluso literalmente sus palabras no estaban lejos de la realidad. Desde que
tuve uso de razón, mi sueño ha sido ser astronauta y poder lograr la hazaña que
Armstrong, Collins y Aldrin alcanzaron ese glorioso 16 de julio del año 1969, cuando llegaron a la Luna. Mi
héroe y paradigma de vida es el controversial ingeniero alemán Wernher von
Braun, quien se ocupó del diseño del cohete Saturno V que impulsó a la misión Apolo
11 para llegar a la Luna. A él siempre lo he llamado “El hombre cohete”.
Nací casi entrado el siglo XXI y la tecnología me es muy afín
ya que he crecido con ella. Tuve un
computador personal desde que pude leer algo.
Incluso mis padres me obsequiaron un telescopio cuando cumplí los ocho años, al ver mi denodada pasión por la historia de la era espacial y la lucha por
la conquista del Espacio que se dio en la así llamada Guerra Fría, entre los
Estados Unidos y la Unión Soviética. Con
ese telescopio, mi mirada y mi imaginación viajaban infinitamente.
Aciagamente mi madre murió cuando cumplí doce años. Ese
terrible y triste suceso cambió mi modo de ver las cosas. Me alejé de mi mundo imaginario en la luna por un período de tiempo, pero después me aferré completamente a ello, por
razones diferentes. Como mi madre estaba en el cielo, ahora quería llegar a la luna para estar más cerca de ella.
Ya que estaba fuera de mi alcance crear un cohete como llegó
a hacerlo el ingeniero Von Braun, he
hecho lo que he podido con lo que he tenido. Creé en el ciberespacio una página web llamada “Un pequeño paso”, en la cual invito a quienes
así lo quieran a unirse a la misión espacial en mi Saturno V virtual, en la que
pueden orbitar la Tierra o volar a la
Luna, y desde allí contemplar la grandeza del Universo y en alguna estrella distinguir
y encontrarse con algún ser querido que
se les haya ido a la eternidad, y poder así sentirse más cerca de ellos.
Yo parafraseo para mí
las palabras del primer hombre que pisó suelo lunar: “Un pequeño paso para el
hombre pero un gran paso para la humanidad”
y las convierto en: “Un pequeño paso en el ciberespacio pero un gran paso
para estar más cerca de mamá”.
Imagino y sueño en mis pensamientos pero, por supuesto, espero y tengo por seguro que al final literalmente me reencontraré con mi amada madre
en la eternidad.
NOTA:
Créditos:
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